Ha pasado un mes largo desde que volvimos a nuestras rutinas de estudio o trabajo.
Se acabaron las vacaciones y nos preocupa, que así mismo, terminó el uso del protector solar.
Te invitamos a no cometer este error. La radiación no es más alta porque estés de vacaciones, ni es menor porque ya no lo estás.
Los rayos ultravioleta son igual de fuertes todos el tiempo y tenemos la falsa percepción que como no estamos en la playa o la piscina, no necesitamos usar y reaplicar el protector solar.
El protector solar debe estar presente en todo momento de tu vida, para prevenir enfermedades de la piel, así como también vamos a evitar que ésta se arrugue prematuramente o le den las molestas manchas.
Para un mejor cuidado de tu piel, ¡CONSULTA AL DERMATÓLOGO!